Y acá está, señores, la evaluación de este año:
COSAS HECHAS
Éxito en la participación de la FIL 2018, desde el stand del
ministerio de culturas, como “autor independiente”.
Escritura de 40 artículos de diversas temáticas.
Publicación de “Emma y los cuadernos de Investigación”, por
editorial Kipus (Marzo), con ilustraciones de Diana Cabrera.
Publicación de “Sepulcros abiertos”, por Subjetiva Editorial
(Abril).
Edición y tutoría de 20 tesis, 16 obtuvieron máxima
distinción.
Obtención del primer premio en el certamen municipal de
cómic, junto a Diana Cabrera.
COSAS NO HECHAS
Carencia de tiempo para cumplir algunos pendientes.
Postergación de 2 antologías pendientes.
MEJORES PELÍCULAS
Algo quema, de .Mauricio Ovando: documental brutal. Obligatorio desde donde se mire.
Hereditary, de Ari Aster: soberbia película de terror. Tensa, no
efectista, interesante en sus actuaciones, acompañada de un argumento básico,
casi simplista, pero que logra incomodar a los espectadores por su premisa
subterránea.
Pesadilla en el infierno, de Pascal Laugier: sugerente juego
de horror, imaginación y psicopatía.
Halloween, de David Gordon Green: reinvención del clásico, único; no aporta
en nada a la película original, pero es brutal en su dirección.
Suspiria, de Luca Guadagnino: Un refrito decente, que
iguala a su original en el cambio situacional de su argumento troncal.
Recomendable totalmente.
Una mujer fantástica, de Sebastián Lelio: gran película chilena, que
parece muy minimalista al principio, pero que tiene algo que no tienen muchas
películas hoy en día: poesía. Recomendable también.
Avengers, Infinity War, de los Hermanos Russo: La mejor
película del UCM, a excepción de la segunda parte del Capitán América y de la
segunda de Iron Man o la primera de Ant Man. Vale la pena verla y revisitarla
una vez más.
El cliente, de …: película “menor” de este director, y sin
embargo, superior a muchas que se dan en Hollywood y el resto del mundo.
Burning, de Lee Chang-Dong: no puedo decir más de esta película, que:
VÉANLA, ES UNA ORDEN.
Infiltrado en el KKK, de Spike Lee: Interesante, muy mucho.
No creía en nada nuevo y bueno que hiciera Spike Lee, pero vale la pena.
Roma, de Alfonso Cuarón: Tiene momentos espectaculares a
pesar de su sencillez, pero los veo maniqueos a los personajes, genéricos,
decepcionantes en cierta medida en relación a la historia en general. Una obra
de arte, en fin.
PEORES PELÍCULAS (sin mencionar al director)
Predators: pésima, pésima, aburrida, un asco.
The Grinch: no, arruinaron al Grinch con un personaje que se
parece al Grinch, pero no es más que un “Quien verde” con actitud PG-13 y
sangre millenial.
Sфren, del infumable Juan Carlos Valdivia: Ya deje de hacer
películas y dedíquese a hacer propagandas para el MAS, que creo le resultan
mejores, señor Valdivia.
Lo peor de los deseos, de Claudio Araya Silva: una película de TROMA,
pero sin el humor de esta.
DECEPCIONES CINEMATOGRÁFICAS (las que sí tenían potencial)
Muralla, de Gory Patiño: Interesante planteamiento que se va a la
mierda cuando el protagonista la hace de “Punisher” (como diría un amigo).
Película de laderas, tiene momentos monumentales, pero otros que no tanto.
Además, mucho jailón haciendo de Juan Pueblo, no funciona.
Venom, de Ruben Fleischer: Ufff, tiene sus momentos, pero al final, una
vaina.
MEJORES LIBROS
Humo, de Gabriela Alemán: grandioso libro, emotivo hasta el paroxismo.
Nefando, de Mónica Ojeda: soberbio en su ejecución, curioso y un libro que sí vale la pena repasar.
Amando la vida, de David Vildoso: una sorpresa para esta gestión, por este cuento de Vildoso. recomendable.
El fin de los días que conocimos, de Fabricio Callapa: ya dije por qué.
Los dos entierros de Emeterio Aymas, de Maximo Pacheco, y bien... frío y agradable es este libro, vale la pena.
Miedo y asco en Cambridge, de Alison Spedding, una Alison antigua y joven. Buena.
Por nuestra Perestroika, de Alejandro Suárez, grandioso libro, tanto en escritura como en argumento.
Aprende a amar el plástico, de Carlos Velásquez, interesante.
PEORES LIBROS (lamentablemente muchos de los elegidos, son nacionales)
Ch´enko total, del Papirri Monroy Chazarreta
Valentina y Natalia, de Ignacio Vera de Rada, ya dije por qué.
Hayley, de Adrián Nieve, ya dije por qué.
Beat, de Alex Salinas, pues bien, mientras lo leía, recordé a Iván Gutiérrez y Giovanni Bello, y ambos autores no son la crema y nata de lo que me gusta; aún así, me pareció aburrida, lo suficiente como para incluirlo como de las peores.
Fijación, de Lisa D´Angelo: un asco.
Sabotaje (Serie Falco), de Arturo Pérez Reverte: un asco x2.
Mi pecado, de Javier Moro: Ya no pues, muy lugar común es esta novela.
Mi corazón en palabras, de Carlos Cuauthémoc Sánchez: y bueno, ni tres páginas completas de lectura de esto y ya supe que es mierda.
Luna de Plutón, de Dross Rotzank. Guácala.
PERSONAJES DEL AÑO
Ninguno.
ANTIPERSONAJES DEL AÑO
PERSPECTIVAS PARA EL 2019
Publicar y escribir, nada más.
Comentarios
¿De qué hablo? Por estos lejanos entornos soñamos con recibir por lo menos un ejemplar de autores bolivianos, puesto que la literatura en español que llega a las bibliotecas es para llorar.
Mi sueño: Tener una biblioteca de autores en español, a la que todos tengan acceso.
Otro sueño: poder traducir al inglés a nuestros autores y publicarlos a este lado.